Las manta rayas y otras especies marinas necesitan oxígeno. Las aguas se alteran por la proliferación de algas que surgen de los contaminantes que los humanos vierten en ellas.
Los recursos naturales del planeta se agotan, y con ellos la capacidad de regeneración de la Tierra. España consume como si tuviéramos otros dos planetas.
Los incendios silenciosos son aquellos que no alcanzan una repercusión mediática. Esto supone un grave problema porque el fuego sigue arrasando millones de hectáreas y la biodiversidad está siendo fulminada.