El ejercicio en el agua ayuda a las personas con sobrepeso u obesidad a sentirse más ligeras y perder peso. Además, es seguro para las articulaciones, quema más calorías y mejora la movilidad y la autoestima.
Experimentar una mayor somnolencia diurna durante un periodo de cinco años se vincula con el doble de riesgo de desarrollar demencia durante esa etapa entre las mujeres mayores de 80 años.