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No hace falta que estén cerca los Juegos Olímpicos para que el deporte de élite vuelva a ser uno de los temas más comentados entre la juventud. La responsable de este fenómeno es Olympo, la serie de Netflix que está causando sensación alrededor del mundo.
La historia de Olympo se desarrolla en un centro de alto rendimiento ubicado en los Pirineos, donde conviven los jóvenes atletas más talentosos del país. Desde rugby y ciclismo hasta heptatlón y natación artística, diferentes disciplinas se entrelazan en una residencia donde la dedicación, el sacrificio y la perseverancia llevan a los protagonistas de Olympo a superar límites inimaginables.
Olympo: ficción con alma deportiva y realismo en cada rutina
Aunque Olympo es una ficción, muchos se preguntan cuánto de lo mostrado refleja la realidad. Para despejar dudas, la producción de Olympo contó con deportistas reales que asesoraron a los actores, ayudándoles a perfeccionar las técnicas y rutinas necesarias para interpretar a sus personajes con autenticidad.
La mayoría de las escenas reflejan con bastante precisión la realidad de un deportista. Una de las nadadoras profesionales de natación artística que participó en el proyecto comenta que se prepararon junto a entrenadoras especializadas y con todas las actrices de la serie desde el inicio. “El director nos explicaba la rutina que quería y nosotras la adaptábamos para que fuera más sencilla para todas. Incluso usamos los mismos gorros y trajes de baño que ellas todo el tiempo”, dice.
Actrices y nadadoras unidas en el rodaje
Se convirtieron en compañeras de rodaje de las actrices principales, como Clara Galle (Amaia) y María Romanillos (Nunu), quienes realizaron un entrenamiento físico de varios meses antes de comenzar a grabar. Aunque hubo muchas repeticiones de tomas desde diferentes ángulos, tanto dentro como fuera del agua, reconoce que “fue muy intenso, pero disfrutamos muchísimo la experiencia”.
Las actrices interpretaron todas las escenas dentro del agua que mostraban desde el pecho hacia arriba, mientras que las nadadoras profesionales se encargaron de grabar todos los movimientos de piernas. Casi un año después de iniciar el proyecto, Olympo logró recrear casi a la perfección un deporte tan técnico y exigente como la natación artística.
Realismo total en instalaciones
No solo las instalaciones utilizadas son las de los centros de alto rendimiento en España, sino que la exigencia en los entrenamientos, la intensidad durante las competiciones y el ambiente en el vestuario reflejan fielmente la vida de los deportistas de élite, así como los desafíos físicos, mentales y sociales que enfrentan diariamente. Desde compartir las máquinas del gimnasio con atletas de otras disciplinas, hasta la presión constante por formar parte del equipo nacional.
En la última semana, esta serie se ha convertido en la producción en un idioma distinto al inglés con mayor audiencia en toda la plataforma a nivel global. Parece muy probable que en los próximos días se anuncie oficialmente la renovación para una segunda temporada. Además, podría darse el caso de que en futuras temporadas se decidan a incluir otros deportes, ampliando así su contenido.
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