
Lectura fácil
El Pleno del Parlamento Europeo ha dado un paso histórico al aprobar el acuerdo que marca una profunda revisión de las normas de circulación en la Unión Europea. La luz verde al texto permitirá, entre otras novedades, que los jóvenes puedan obtener el carné de conducir a partir de los 17 años, una medida enmarcada en una reforma ambiciosa que busca mejorar la seguridad vial y abordar la escasez de conductores profesionales en el continente.
Esta decisión del martes sienta las bases para un futuro carné de conducir digital europeo, con una validez de 15 años, además de incorporar ajustes cruciales en los permisos profesionales y en la retirada transfronteriza de licencias por infracciones graves.
Permiso de Categoría B desde los 17: Con acompañante obligatorio
La medida más llamativa afecta directamente a los conductores más jóvenes. A partir de ahora, los chicos y chicas de 17 años podrán obtener el carné de conducir de automóviles (Categoría B), si bien con una condición ineludible: deberán ir siempre acompañados de un conductor con experiencia hasta que alcancen la mayoría de edad. Este requisito busca conciliar la necesidad de dotar de movilidad a los jóvenes con la imperiosa mejora de la seguridad en las carreteras.
En el ámbito profesional, la reforma otorga flexibilidad a los Estados miembros. Podrán rebajar a 18 años la edad mínima para sacarse el carné de conducir de camión (Categoría C) y a 21 la licencia de autobús (Categoría D), siempre y cuando los aspirantes posean un certificado de competencia profesional. En España, si bien ya se permite conducir camiones a los 18 años con el certificado pertinente, esta armonización europea facilitará la movilidad y el empleo transfronterizo en un sector con déficit de personal. Sin el citado certificado, las edades mínimas se mantendrán en 21 y 24 años, respectivamente.
Más exigencia para la seguridad y el carné de conducir
La directiva aprobada no solo modifica las edades, sino que endurece las condiciones y la formación para todos. Se establece un periodo de prueba de al menos dos años para los conductores noveles, quienes se enfrentarán a normas más estrictas y a sanciones más duras por infracciones como el alcohol al volante o el no uso del cinturón de seguridad y sistemas de retención infantil.
El examen de conducir también se actualizará para incluir contenido sobre riesgos de los ángulos muertos, sistemas de asistencia al conductor, la apertura segura de las puertas y, fundamentalmente, los riesgos de distracción por el uso del teléfono móvil. Se pondrá especial énfasis en la concienciación sobre los usuarios vulnerables de la vía pública, como peatones y ciclistas.
Además, antes de obtener el primer permiso, o para solicitar su renovación, los conductores deberán superar un examen médico que incluirá pruebas de la vista y del sistema cardiovascular. Los países de la UE podrán sustituir este examen para coches y motocicletas por formularios de autoevaluación u otros sistemas nacionales.
Retirada del carné efectiva en toda la UE
Una de las reformas más esperadas es la que busca combatir la impunidad transfronteriza. La retirada, suspensión o restricción del carné de conducir por infracciones graves –como conducir bajo los efectos del alcohol o drogas o provocar accidentes con víctimas mortales– será efectiva en toda la Unión Europea.
Hasta ahora, un Estado miembro solo podía aplicar la retirada en su propio territorio si el permiso había sido expedido en otro país. Con los cambios, la autoridad sancionadora notificará a través de la red europea RESPER al país que emitió el permiso para que aplique una sanción equivalente, garantizando que quien "ponga en peligro vidas" responda por ello, en palabras de la eurodiputada Oihane Agirregoitia, ponente liberal en la Comisión de Transportes.
Finalmente, la reforma acordada prevé la introducción de un carné de conducir digital europeo en el horizonte de 2030, válido para turismos y motocicletas durante 15 años (o 10 años en los países que lo usen como documento de identidad). Tras el visto bueno de Estrasburgo, la norma solo espera su publicación en el Diario Oficial de la UE. Los gobiernos nacionales dispondrán ahora de hasta cuatro años para transponer e implementar la nueva legislación, diseñada para reducir las 20.000 muertes anuales que aún dejan los riesgos en carretera.
Añadir nuevo comentario