El verano: más del 70 % de los españoles señala que les cuesta cuidarse en esta época del año

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15/08/2025 - 09:00
Cuidados durante el verano

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Las vacaciones, las reuniones familiares, los viajes y querer disfrutar de caprichos, como helados, bebidas calóricas y con alcohol, son factores que pueden poner a prueba nuestros hábitos alimentarios durante estos meses.

De acuerdo con la nueva encuesta sobre hábitos y actitudes realizada por PronoKal, marca especializada en la pérdida y el control del peso, revela cómo el verano impacta en los hábitos de estilo de vida, como la alimentación, el ejercicio y el bienestar emocional, de sus pacientes y expacientes. La encuesta, con una muestra de 844 personas —principalmente mujeres mayores de 45 años—, destaca las principales preocupaciones y tensiones que genera esta época del año, así como las oportunidades de mejora en el bienestar y la salud general.

Presión, expectativas y salud: el reto de cuidarse en verano

Con la llegada del verano, el deseo de cuidarse no nace siempre de uno mismo. Y es que, según los datos de esta encuesta, un 58 % reconoce sentir algún grado de presión social o estética por “lucir bien” en esta época del año. Por otro lado, un 35 % asegura que, aunque no experimenta esa presión, hace más esfuerzos por cuidarse, lo que sugiere que las expectativas externas influyen incluso de forma indirecta. Tan solo un 6 % dice no sentir ninguna presión. Estos datos

reflejan cómo el entorno y las expectativas sociales siguen teniendo un peso considerable en la forma en que nos relacionamos con nuestro cuerpo más allá de la salud.

Por ello, no sorprende que casi un 90 % de los encuestados se plantee objetivos concretos de salud o peso antes de estos meses, independientemente de si luego consiguen cumplirlos o no. Lo que sí queda claro es que, al menos, la intención de cuidarse y la consciencia acerca de la salud están muy presentes.

Pero como bien se refleja en los datos, la gran mayoría (70 %) opina que, a pesar de esas buenas intenciones, en verano es más difícil conseguir los objetivos de pérdida de peso o mantenimiento frente a otras épocas del año.

Principales barreras de los españoles para cuidarse

El resultado más relevante del informe es que el hábito saludable más difícil de mantener en verano es comer de forma saludable (en base al plan que tenían establecido previamente). Más del 50 % de los encuestados identifica el aumento de las reuniones sociales, las tentaciones culinarias y la falta de rutina como los principales motivos para no cumplir con los objetivos de una alimentación sana.

Al profundizar en cómo cambia la alimentación durante esta época, la mayoría de los encuestados reconoce que tiende a picar más entre horas y a consumir más alcohol o bebidas azucaradas. De hecho, afirman que la dificultad de beber solo agua (sin incluir bebidas calóricas), juega un papel clave en el desafío de seguir una alimentación saludable. Muchos también admiten que consumen más "caprichos" o alimentos calóricos e, incluso, se saltan comidas, posiblemente como una forma de compensación de excesos o debido a la irregularidad de los horarios estivales.

Aunque también surgen algunos hábitos saludables, como un mayor consumo de frutas y verduras —probablemente por su frescura y la apetencia que generan con el calor—, este cambio positivo queda en un segundo plano frente a los excesos más frecuentes.

Por otro lado, también se observa una dificultad para mantener una rutina de ejercicio físico. Sin embargo, este reto no parece depender únicamente de la estación del año, ya que muchas personas indican que su nivel de actividad no cambia mucho en estos meses: el 31 % afirma que mantiene la misma rutina.

Finalmente, también es interesante ver cómo, según los resultados de la encuesta, muchas personas logran desconectar y reducir el estrés: el 34 % señalaron que es una época en la que se relajan mucho más. Sin embargo, no todos viven esta temporada como un respiro: el 25 % la perciben como más estresante, debido a los cambios de rutina y a la dificultad para cumplir sus objetivos personales.

En definitiva, mientras algunas personas aprovechan la temporada para desconectar y cuidarse, otras enfrentan más descontrol y dificultades para mantener sus metas. Esta diversidad nos recuerda que el verano puede ser, a la vez, una oportunidad para unos y un desafío para otros.

En conjunto, estos factores muestran que, mantener unos hábitos saludables, no depende solo de la fuerza de voluntad, sino también del entorno, los hábitos sociales y las condiciones externas.

Recomendaciones de expertos

Ante estos retos, los expertos en salud y bienestar de PronoKal recomiendan tomar medidas prácticas para mantener el equilibrio:

  1. Planificación de comidas: anticipar los menús y evitar dejar las decisiones alimentarias al impulso puede ayudar a controlar las tentaciones. Además, es muy importante beber un mínimo de 2 litros de agua al día e iniciar nuestras comidas con ensaladas y verduras. También es importante incluir siempre la proteína en nuestras diferentes comidas y snacks del día.
  2. Hidratación constante: evitar las bebidas azucaradas y optar por agua o infusiones frías es clave para mantenerse bien hidratado y evitar las calorías vacías.
  3. Actividades al aire libre: aprovechar el buen tiempo para realizar actividad física al aire libre, como caminar o nadar, puede ser una forma efectiva de mantenerse activo sin sentir que se está haciendo un esfuerzo adicional.
  4. Gestión del estrés: practicar técnicas de relajación, como la meditación o la respiración profunda, puede ser útil para reducir el estrés derivado de los cambios en la rutina estival.
  5. Metas realistas: es importante plantearse objetivos alcanzables y no caer en la presión social. Establecer metas pequeñas y alcanzables puede ser más efectivo que buscar cambios drásticos que, a menudo, no se mantienen.

Cada persona, dependiendo de sus objetivos, su entorno y sus hábitos, vive el verano de manera diferente. Sin embargo, la clave está en equilibrar ciertas indulgencias esporádicas con la constancia diaria y la focalización de objetivos. Cuidar de uno mismo y perder peso no se trata solo de "lucir bien", sino de conseguir el bienestar que deseas.

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