11/06/2025 - 09:01
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El Ministerio de Trabajo y Economía Social, a través del Observatorio de las Ocupaciones del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal), ha difundido el Informe del Mercado de Trabajo de las personas con discapacidad correspondiente a los datos de 2024. Este informe examina las principales características del empleo de este colectivo y su evolución en los últimos años.
El principal hallazgo del informe es que, a pesar del impacto de la pandemia, en 2023 se registró un incremento de 119.251 personas afiliadas con discapacidad en comparación con 2015. Asimismo, el número de personas con discapacidad ocupadas creció en 139.700 en ese mismo período.
Situación laboral de las personas con discapacidad
De acuerdo con el SEPE, la evolución de los contratos y de las personas contratadas se puede dividir en cuatro etapas: una fase de crecimiento entre 2015 y 2019; una caída en 2020 debido a la crisis sanitaria del COVID-19; seguida de una recuperación progresiva en 2021 y 2022. No obstante, como se ha mencionado, los datos positivos más destacados son el aumento en 119.251 personas afiliadas y en 139.700 ocupadas respecto a 2015.
En cuanto a las ocupaciones más demandadas por personas con discapacidad, destacan por su volumen las siguientes: personal de limpieza en oficinas, hoteles y similares; peones en industrias manufactureras; vendedores en comercios y almacenes; y conserjes de edificios. Estas cuatro categorías representaron casi el 27 % del total de solicitudes de empleo del colectivo.
La ocupación de conserje de edificios fue especialmente significativa, ya que representó el 13,75 % del total de contratos firmados por empleados con discapacidad, siendo la proporción más alta entre las diez ocupaciones con mayor número de contrataciones. Además, las ocupaciones solicitadas por desempleados con discapacidad coinciden con las demandadas por el resto de la población desempleada, sin que se observen diferencias relevantes entre ambos grupos.
La contratación de empleados con discapacidad
Al analizar la contratación de personas con discapacidad, se observa que el 67,90 % de los contratos corresponde a personas con estudios de nivel obligatorio (primaria y ESO). En cuanto a niveles educativos superiores, un 26,61 % tenía formación de Bachillerato o Formación Profesional, y únicamente el 5,50 % contaba con estudios universitarios.
En relación con la edad, el grupo de personas mayores de 45 años es el más numeroso dentro del colectivo con discapacidad, representando el 64,17 % del total de afiliaciones, tanto en hombres como en mujeres. Si se observa por rangos de edad, se detecta que la afiliación aumenta conforme lo hace la edad, siendo las personas mayores de 25 años quienes concentran cerca del 97 % de las inscripciones.
Brecha de género
En cuanto al género, los hombres predominan en todos los regímenes de cotización, salvo en el de empleados del hogar, donde las mujeres representan el 92,32 % de los afiliados. La brecha de género está presente en todos los grupos de edad, aunque es menos pronunciada entre las mujeres menores de 25 años.
En términos generales, el informe destaca una evolución positiva en la afiliación de personas con discapacidad en todos los regímenes. Especial mención merece el crecimiento interanual en el régimen del hogar y el régimen general, donde se concentra más del 90,75 % de los afiliados, frente a menos del 8 % en el régimen de autónomos.
Por otro lado, el número de desempleados con discapacidad representaba el 5,29 % del total de personas paradas a fecha 31 de diciembre de 2024, lo que implica una disminución respecto al año anterior. Dentro de este grupo, las mujeres desempleadas con discapacidad representaron el 2,83 % del total de personas demandantes de empleo, una proporción superior a la de los hombres. Nuevamente, el grupo de mayores de 45 años fue el más destacado, representando el 63,65 % del total de personas con discapacidad en situación de desempleo.
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