Matriculas parciales y adaptaciones metodológicas para las personas con discapacidad

Según afirma la secretaria general de Formación Profesional, Clara Sanz, el texto de esta nueva ley de FP “es muy sensible” a la realidad de las personas con discapacidad, además de con cualquier tipo de dificultad a la hora de la inserción laboral. Por eso, a partir de ahora se permitirá matrículas parciales y adaptaciones metodológicas.

Una ley que rompe con todas las barreras de la FP

La secretaria Sanz señala que el sistema anterior “les impedía brillar”, por lo que esta nueva ley, rompe con todas las barreras y pone el sistema al servicio de todas las personas con discapacidad. Abandona definitivamente la idea de la falta de adaptación para las personas con necesidades específicas. Además, señala que “el abandono temprano tiene mucho que ver con no cuidar con la individualización de la enseñanza” y la FP es una formación que se presta a ello.

Por eso, la secretaria afirmó a Servimedia que este nuevo texto permite que los estudiantes obtengan un certificado de los estudios que realicen, sean la cantidad que sean, sin necesidad de tener un ciclo formativo completo y en determinadas áreas de conocimiento. Ahora cualquier persona con discapacidad tiene la opción de formarse sin necesidad de hacerlo al 100 %.

“Garantizar la permanencia” en las formaciones y dotar de recursos necesarios

Otra de las cuestiones que se ha planteado para la formación de personas con discapacidad es “garantizar la permanencia” en las formaciones y dotar de todos los recursos necesarios para permitir adaptaciones metodológicas y de acceso necesarias para lograr los objetivos.

“Cuando el equipo docente considera que con más tiempo esa persona puede conseguir esas competencias, se eliminan las limitaciones de permanencias en un ciclo formativo. Puede permanecer el doble de años cualquier persona”, señala Sanz.

Ampliar la edad de permanencia del sistema educativo hasta los 21 años

La futura norma incluye la ampliación de la edad de permanencia en el sistema educativo, ya que se había detectado que las personas con discapacidad salían del sistema educativo y no podían optar a ninguna formación. Ahora la edad de permanencia ha aumentado hasta los 21 años.

Con este nuevo objetivo, la secretaria de la FP señala que “tenemos que dar un paso más para que las personas con discapacidad no estén en tres o cuatro perfiles profesionales, eso es una anomalía. Tenemos que hacer que estén en el mercado hasta donde puedan”.

A pesar de eso, las personas con discapacidad en este sector educativo apenas llegan al 1,5 %, cuando suponen casi el 10 % de la población. Por este motivo la secretaria insiste en conseguir que la FP sea una vía totalmente abierta, sobre todo para las personas con discapacidad.

Un objetivo para los jóvenes con discapacidad, pero también para las mujeres con discapacidad

La mayoría de los objetivos se centran en los más jóvenes, pero también en las mujeres. Actualmente son pocas las que se encuentran en sectores como ciencias y tecnologías, pero las mujeres con discapacidad quedan aún más reducidas dentro de estos porcentajes.

Por eso es importante conseguir igualar ambos porcentajes y lograr que las personas con discapacidad puedan comenzar sus estudios sin temor a terminarlos en un momento concreto y no obtener su certificado. Una modificación de la ley también es una modificación social de la población.