Yiwu, la ciudad china que fabrica el 80 % de la decoración navideña del mundo

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02/08/2025 - 09:00
Una almacén con decoración navideña fabricada en Yiwu

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Dentro de unos meses, cuando las luces comiencen a adornar balcones y escaparates, y el espíritu navideño se respire en cada rincón del planeta, millones de personas sacarán de sus armarios los mismos objetos festivos: bolas brillantes, guirnaldas, figuras de Papá Noel, renos y árboles de plástico. Lo que muchos desconocen es que gran parte de esa decoración navideña han nacido en un mismo lugar: Yiwu, una ciudad situada en el este de China que se ha ganado el apodo de "la Laponia china".

El epicentro mundial de la decoración navideña

Yiwu es el corazón de la industria navideña global. Se estima que aproximadamente el 80 % de la decoración navideña que se comercializan en todo el mundo provienen de esta ciudad. Este porcentaje convierte a Yiwu en una pieza clave de la maquinaria comercial que rodea las celebraciones occidentales.

Su inmenso mercado mayorista, conocido como el Mercado Internacional de Comercio de Yiwu, es el más grande del planeta. Este complejo cuenta con más de cinco millones de metros cuadrados, el equivalente a unos 750 campos de fútbol, y alberga más de 75.000 puestos. En sus pasillos se alinean estanterías repletas de luces LED, elfos, árboles artificiales, muñecos de nieve, renos de peluche y todo tipo de decoración navideña.

Una ciudad dedicada a producir celebraciones

En Yiwu hay más de 600 fábricas que trabajan sin descanso para abastecer la demanda global de decoración navideña. Muchas de estas fábricas funcionan las 24 horas del día, con turnos de entre 12 y 16 horas, a menudo siete días a la semana. La mayor parte de la plantilla está compuesta por mujeres jóvenes, aunque hay trabajadores de todas las edades.

A pesar de la intensidad del trabajo, los salarios mensuales oscilan entre los 150 y los 175 euros, una cifra modesta si se tiene en cuenta que en 2022, solo el comercio navideño de Yiwu generó ventas estimadas en 61.500 millones de euros en productos festivos.

Muchos de los trabajadores desconocen el verdadero significado de los objetos que producen en masa. Según recogía un reportaje del Daily Mail, algunos empleados comparan la Navidad con el Año Nuevo Chino, entendiendo que para los occidentales se trata de una festividad importante, aunque para ellos no tenga una implicación cultural.

Más allá de la Navidad: Halloween y San Valentín

Aunque la decoración navideña sea el motor principal de su economía estacional, Yiwu también produce adornos para otras festividades occidentales, como Halloween y San Valentín. Esta diversificación ha permitido que la ciudad mantenga una actividad productiva constante durante todo el año, generando un flujo permanente de exportaciones hacia Europa, América y otras regiones del mundo.

El futuro de esta próspera ciudad industrial, sin embargo, no está exento de desafíos. Las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, especialmente bajo la administración de Donald Trump, han traído consigo aranceles que afectan a las exportaciones chinas, incluyendo los adornos festivos fabricados en Yiwu.

Aunque estas políticas aún no han frenado la demanda global de productos festivos, sí han generado incertidumbre entre los empresarios y trabajadores locales, que ven peligrar el modelo económico que ha sostenido a la ciudad durante décadas.

Una Navidad con sello chino

Cada vez que colocamos una estrella sobre el árbol o encendemos una guirnalda de luces, estamos conectando, aunque sea de manera indirecta, con una cadena de producción que comienza a miles de kilómetros, en fábricas que nunca duermen y donde la Navidad se fabrica más que se celebra.

Yiwu, con su descomunal maquinaria y sus miles de trabajadores, seguirá siendo, al menos por ahora, el auténtico taller de Santa Claus del siglo XXI de donde sale toda la decoración navideña que inunda las casas y comercios de gran parte del mundo.

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