Europa aprueba la Estrategia de Resiliencia del Agua para garantizar un futuro sostenible

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28/10/2025 - 19:00
Agua limpia y asequible para todos

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Los 27 ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea dieron este martes su respaldo definitivo a la Estrategia Europea de Resiliencia del Agua, una iniciativa presentada por la Comisión Europea en junio con el objetivo de restaurar el equilibrio del ciclo hídrico, asegurar el acceso universal a un recurso limpio y promover una economía hídrica sostenible, innovadora y competitiva.

Con esta decisión, el Consejo de Medio Ambiente de la UE respalda una visión común a largo plazo que pretende fortalecer la seguridad hídrica de Europa y aumentar su capacidad para enfrentar los efectos del cambio climático.

La aprobación llega tras los informes publicados por la Comisión Europea en febrero de este año, que ofrecieron un diagnóstico preocupante sobre la salud hídrica en el continente. Según los estudios, el 34 % del territorio europeo sufre escasez, mientras que únicamente el 37 % de las masas de agua superficiales presentan un estado ecológico satisfactorio. Aún más preocupante es que menos del 30 % de las aguas analizadas alcanzan estándares adecuados en términos de calidad química.

Estos datos confirman los efectos acumulados de décadas de sobreexplotación, contaminación y deficiencias en la planificación hídrica. Ante este panorama, los ministros consideran urgente reforzar las políticas de conservación, modernizar las infraestructuras existentes y mejorar la cooperación entre los Estados miembros.

La Estrategia Europea de Resiliencia del Agua: visión a 2050

Presentada por la Comisión Europea en junio, la Estrategia de Resiliencia Hídrica se alinea con la visión de la UE para 2050, que busca garantizar la resiliencia hídrica en todos los sectores. Este plan propone una gestión integrada del recurso que sitúe el recurso en el centro de las políticas ambientales, agrícolas, industriales y climáticas.

El documento aprobado por los ministros no solo representa un marco estratégico, sino también una llamada a la acción conjunta en toda Europa. El Consejo insta a los países y a las instituciones comunitarias a intensificar los esfuerzos para abordar los desafíos hídricos de manera coordinada, con el fin de proteger tanto los ecosistemas como la salud y el bienestar de los ciudadanos europeos.

Durante la reunión, Magnus Heunicke, ministro de Medio Ambiente e Igualdad de Género de Dinamarca y actual presidente rotatorio del Consejo de la UE, destacó la importancia del acuerdo: “Los ministros celebraron la estrategia de la Comisión como un marco integral que garantizará agua limpia para todos y reforzará la competitividad de la economía europea”.

Heunicke subrayó además que la cooperación entre gobiernos, instituciones y sectores económicos será esencial para hacer del recurso un eje central en la lucha contra el cambio climático y en la mejora de la resiliencia frente a futuras crisis ambientales y sociales.

Proteger y restaurar el ciclo del recruso

La estrategia adoptada pone especial énfasis en restaurar el ciclo natural del agua, considerado por los ministros uno de los pilares imprescindibles para afrontar los fenómenos extremos que afectan cada vez más al continente, como inundaciones, sequías prolongadas o el aumento de las temperaturas.

El Consejo señaló que la restauración de humedales, ríos y ecosistemas acuáticos es fundamental para mantener la estabilidad del abastecimiento y apoyar la biodiversidad. Este enfoque no solo busca evitar pérdidas económicas, sino también reforzar la capacidad de adaptación frente a los impactos del cambio climático.

Prioridades clave: sostenibilidad, equidad y tecnología

Entre las prioridades señaladas por los ministros, figuran:

  • Reforzar la prevención de la contaminación en la fuente, incluyendo la reducción de los contaminantes emergentes como los PFAS y otras sustancias químicas peligrosas.
  • Garantizar un acceso equitativo al agua y al saneamiento, mediante la modernización de redes, la reducción de fugas y la mejora en los sistemas de distribución.
  • Impulsar inversiones en infraestructuras resilientes y en el desarrollo de herramientas digitales y sistemas de alerta temprana que permitan anticipar y mitigar el impacto de fenómenos hídricos extremos.

El Consejo también pidió a los Estados miembros reforzar la infraestructura hídrica en áreas rurales, remotas e insulares, donde la vulnerabilidad ante la escasez y la contaminación es más alta.

Una estrategia viva con revisión en 2027

El acuerdo alcanzado no se limita a una declaración de intenciones. Los ministros solicitaron a la Comisión Europea informar periódicamente sobre los avances en la implementación de la estrategia. Está prevista una evaluación intermedia en 2027, que servirá para medir el progreso, ajustar las medidas y definir nuevas prioridades conforme a los avances tecnológicos y las necesidades territoriales.

Con la aprobación de esta hoja de ruta, la Unión Europea reafirma su compromiso con una gestión del agua moderna y sostenible, capaz de proteger los recursos hídricos, fortalecer la economía verde y garantizar que las generaciones futuras disfruten de un recurso esencial para la vida y el desarrollo del continente.

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