
Lectura fácil
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha alertado sobre la complejidad de los casos de violencia de género detectados entre abril y junio, donde la mayoría de las víctimas presentaban una combinación de vulnerabilidades que agravan su situación. Entre ellas destacan la precariedad económica, la dependencia de sustancias tóxicas o alcohol, problemas de salud mental y el aislamiento propio de zonas rurales. A esto se suma la situación de muchas mujeres migrantes que carecen de redes de protección social.
“Estamos viendo que las víctimas no solo sufren violencia, sino que arrastran otras circunstancias que dificultan su salida del ciclo de maltrato”, explicó Redondo, poniendo en evidencia la necesidad de intervenciones integrales.
La escasa denuncia previa continúa siendo un problema persistente para la violencia de género
Un dato preocupante que ha subrayado la ministra es que, de los 17 asesinatos registrados en este periodo, únicamente en tres casos había denuncia previa. De estas, una correspondía al denominado protocolo cero, es decir, una actuación iniciada por la propia policía sin que la víctima de violencia de género ni su entorno presentaran la denuncia.
Redondo señaló que este fenómeno evidencia “un problema de infradenuncia” y criticó a quienes, desde sectores políticos, cuestionan la veracidad de las denuncias. “El Partido Popular sigue hablando de denuncias falsas cuando representan apenas el 0,001%”, puntualizó la ministra, desmintiendo con cifras ese discurso.
El papel del entorno es clave para prevenir tragedias
En cuatro de los casos mortales de violencia de género, el entorno cercano tenía conocimiento de la situación de violencia, y en tres de ellos incluso llegaron a contactar en algún momento con la policía, los servicios sociales o sanitarios. Sin embargo, estas alertas no fueron suficientes para evitar el desenlace fatal.
Ante este escenario, Redondo ha instado a la sociedad a actuar con responsabilidad: “Si hay sospecha de maltrato, es fundamental denunciar. La colaboración del entorno puede salvar vidas”.
Uno de los aspectos que más preocupa al Ministerio es el aumento de asesinatos durante los meses de verano. Redondo recordó que en julio y agosto se concentra el 30 % de los feminicidios en España, por lo que ha declarado la situación de “alerta máxima”.
“Quiero alertar a la población: nos aproximamos a los meses más difíciles, donde sabemos que se producen el mayor número de asesinatos por violencia de género”, advirtió. Este incremento se asocia a factores como las vacaciones, la convivencia prolongada y el aislamiento en entornos familiares.
Refuerzos en el sistema y medidas específicas
Aunque Redondo calificó el sistema de protección español como “ejemplar”, reconoció que no es perfecto y que presenta fallos que es necesario corregir. Para ello, el Gobierno trabaja en mecanismos específicos destinados a “cerrar las grietas” que facilitan que algunas mujeres queden desprotegidas ante la violencia de género. Actualmente, el sistema Viogén registra más de 100.000 mujeres en seguimiento.
Entre las medidas anunciadas contra la violencia de género figura el refuerzo de las unidades de género y la coordinación con el Consejo General del Poder Judicial, así como con los distintos cuerpos policiales, tanto a nivel nacional como autonómico y local.
Añadir nuevo comentario