¿Cómo sigue la investigación para encontrar una vacuna contra el coronavirus?

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16/06/2020 - 16:16
La reducción de contagios dificulta las pruebas para la vacuna.

Lectura fácil

Laboratorios de todo el mundo iniciaron hace ya unos meses una carrera contra reloj para encontrar una vacuna que pueda contrarrestar al nuevo coronavirus. No es el único recurso científico para detener al virus, pero sí el más importante.

Encontrar una vacuna contra el coronavirus

Las vacunas son preparaciones biológicas capaces de generar inmunidad contra una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos dentro del organismo. Habitualmente, se basan en el microorganismo patógeno (bacterias o virus), muerto o debilitado, sus toxinas o una de sus proteínas de superficie.

Las investigaciones siempre parten de la premisa de que el desarrollo de vacunas se caracteriza por un alto nivel de fracaso, pero los proyectos en marcha son más de un centenar, algunos ya en fase avanzada, y nunca antes la comunidad científica internacional había actuado tan coordinadamente ni con tantos recursos para encontrar una solución sanitaria.

Hacer pruebas en humanos

Tras meses de pruebas con animales y, hasta en 10 casos, con grupos pequeños de personas, los meses de verano se presentan como la etapa en la que los proyectos más prometedores empezarán a hacer pruebas a gran escala en humanos, lo que se conoce como fase 3 en términos de investigación de vacunas.

Las duras medidas de confinamiento impuestas en casi todos los países han funcionado y han hecho que la curva de contagios se aplane sustancialmente en casi todo el hemisferio norte.

Voluntarios expuestos al contagio

Sin embargo, este éxito de las autoridades sanitarias ha hecho que el desarrollo de las vacunas se vea ahora fuertemente comprometido. El procedimiento normal de la fase 3 consiste en inocular la vacuna experimental en un grupo amplio de personas y un placebo en otro grupo del mismo tamaño y sometido a las mismas condiciones ambientales.

Tras un periodo en el que se deja a los voluntarios expuestos al contagio, se valora la efectividad de la vacuna comparando los casos entre los que recibieron la vacuna y el placebo.

Encontrar poblaciones extensas que estén bajo riesgo de infección

El gran problema para los laboratorios y equipos de investigación ahora es encontrar poblaciones lo suficientemente extensas que estén bajo riesgo de infección, dado que los contagios locales han sido reducidos drásticamente en los países en los que se están desarrollando los principales proyectos: Estados Unidos, China y Reino Unido.

Hasta que no se encuentre una vacuna efectiva, el coronavirus SARS-CoV-2 podrá circular libremente por las personas, que estarán  expuestas al patógeno. El nuevo virus ha demostrado una capacidad de contagio superior a la que en un principio se estimó, lo que le ha permitido propagarse a lo largo y ancho del mundo de una manera explosiva.

La investigación en Estados Unidos

El laboratorio estadounidense Moderna está desarrollando uno de los proyectos de vacuna más avanzados y prometedores hasta la fecha mediante el ARN del virus. Se trata del primero de los cinco proyectos en recibir la financiación del programa especial con el que el Gobierno espera comenzar a vacunar a su población antes de que acabe el año.

El pasado 11 de julio, la compañía anunció que estaba en condiciones de comenzar la fase 3, inoculando una dosis de su vacuna de 100 microgramos -cantidad establecida en la fase anterior- en 30.000 voluntarios en suelo estadounidense y espera tener las vacunas listas para comienzos de 2021.

China busca voluntarios en Brasil

La empresa privada china Sinovac Biotech está desarrollando una vacuna basada en una versión debilitada del propio coronavirus. El proyecto está listo para avanzar a la fase 3, pero el principal problema es que la enfermedad ha sido prácticamente erradicada en China, donde, salvo un nuevo brote aparecido en Pekín, los contagios locales se han reducido a cero.

Sinovac necesitará, por tanto, salir fuera del territorio chino para poder testar su vacuna en grupos amplios de personas con riesgo de contagio y el elegido ha sido Brasil, uno de los países más castigados actualmente por la pandemia.

Reino Unido, uno de los primeros en realizar pruebas en humanos

El proyecto de vacuna que desarrolla la Universidad de Oxford se convirtió en uno de los primeros en realizar pruebas en humanos y los científicos del equipo auguraban hasta un 80% de opciones de que estuviera lista tan pronto como en septiembre.

Pero una vez más, la reducción drástica de casos en el Reino Unido se ha convertido en un obstáculo para lograr una vacuna hasta el punto de que, el profesor Adrian Hill, miembro del equipo de investigación de Oxford, admitió que las posibilidades de éxito ya habían caído al 50%. "Estamos en la extraña situación de querer que el Covid se quede, al menos un poco más", declaró Hill.

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