La votación sobre la reducción de jornada laboral se complica: Junts rechaza la propuesta del Gobierno

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10/09/2025 - 10:03
Votación clave hoy para la reducción de la jornada laboral

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La votación de la propuesta para reducir la jornada laboral en España se enfrenta a uno de sus momentos más decisivos. Todo apunta a que el Gobierno tendrá muy difícil sacar adelante la medida en el Congreso, debido principalmente a la postura de Junts, que ha confirmado en las últimas horas que se opone a la iniciativa.

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, pese al panorama desfavorable, continúa defendiendo la importancia de esta reforma para millones de trabajadores y ha insistido en que no renunciará a seguir impulsándola incluso si se tumba en el pleno.

Un proyecto clave para 12,5 millones de trabajadores con la reducción de la jornada laboral

La reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales se ha convertido en un eje central de la agenda de Trabajo. Según Yolanda Díaz, el debate no admite ambigüedades: está entre quienes buscan mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y quienes, a su juicio, se mantienen al lado de posturas que frenan el progreso.

En un tono contundente, la ministra subrayó que el resultado de la votación será trascendental para 12,5 millones de asalariados que esperan avances en conciliación y bienestar laboral. Díaz recalcó que, en caso de no aprobarse, “no la pierde ella como política, sino la gente trabajadora de este país”.

La posición de Junts: economía catalana y pymes en el centro

El principal obstáculo para el Ejecutivo es el rechazo de Junts. La formación independentista siempre se ha mostrado reticente a esta reducción, alegando que las pequeñas y medianas empresas catalanas se verían seriamente perjudicadas.

Tras una reunión mantenida este lunes entre representantes de Sumar y Junts, ambas partes reconocieron que las posiciones siguen demasiado alejadas, hasta el punto de que el partido de Carles Puigdemont ha confirmado finalmente que votará en contra.

Fuentes de Junts sostienen que no perciben margen suficiente para una negociación que les convenza de dar su apoyo. Desde el entorno de Yolanda Díaz, sin embargo, se insiste en que la oportunidad de modernizar las pymes y medianas empresas es hoy más real que nunca.

Un tira y afloja con Puigdemont

Uno de los aspectos más llamativos de esta negociación ha sido el contacto directo entre Yolanda Díaz y Carles Puigdemont. La vicepresidenta confirmó públicamente que ha conversado con el expresidente de la Generalitat, asegurando que “no miente” al respecto.

No obstante, desde Junts se ha matizado esta versión. Jordi Turull, secretario general del partido, declaró que no le consta ese diálogo. Díaz replicó que sus palabras simplemente expresaban desconocimiento, no una negación, y se negó a dar detalles sobre los contenidos tratados.

Este pulso verbal refleja la dureza de una negociación en la que cada gesto y declaración impacta de lleno en el debate político.

A pesar del rechazo de Junts, Díaz ha adoptado un discurso firme y directo hacia los votantes catalanes y al conjunto de ciudadanos. Según la líder de Sumar, la mayoría de la sociedad catalana apoya esta reducción de la jornada laboral y la pregunta de fondo es a quién están dispuestos a escuchar los partidos políticos: a la ciudadanía o a otros intereses.

Además, no se ha privado de lanzar reproches a la oposición. Al Partido Popular lo acusa de situarse claramente en contra de los trabajadores. Incluso recurrió a la ironía al recordar que la votación coincide con el cumpleaños de Alberto Núñez Feijóo, a quien acusó de “celebrar su día golpeando en la cara a los asalariados españoles”.

El papel del Gobierno: insistir hasta el último minuto

Aunque las previsiones son negativas, el Gobierno no ha arrojado la toalla. Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, recordó en una entrevista que desde el Ejecutivo se trabajará hasta el último minuto para intentar sacar adelante la reforma para la reducción de la jornada laboral.

Esta tenacidad no es nueva: ya en anteriores ocasiones, cuando Junts bloqueó la propuesta y obligó a aplazar la votación en julio, Yolanda Díaz mantuvo la esperanza de reconducir posiciones. Aquella vez se decidió aplazar la votación al final del verano con la promesa de seguir negociando. Hoy, sin embargo, la situación parece aún más estancada.

La votación del miércoles se perfila como un golpe para el Ministerio de Trabajo. La confirmación del voto negativo de Junts representa un varapalo que frena uno de los proyectos estrella de Yolanda Díaz. Sin embargo, la ministra no da por terminado el camino.

Ya ha adelantado que, aunque pierda en el Congreso, volverá a presentar la medida en el futuro. En sus palabras, se trata de una transformación que tarde o temprano deberá llegar. La reducción de la jornada laboral, insiste, es una necesidad que responde a la demanda mayoritaria de la sociedad.

Con este discurso, Díaz pretende trasladar la idea de que la derrota parlamentaria no es definitiva, sino un episodio más en una batalla política prolongada.

Un pulso con final abierto

A falta de horas para la votación, la reducción de la jornada laboral enfrenta un escollo difícil de superar. El veto de Junts y la oposición explícita del PP prácticamente cierran el paso a la propuesta. Aun así, Yolanda Díaz mantiene su estrategia de resistencia: perder la votación no significa retirar la iniciativa, sino redoblar la apuesta para que, tarde o temprano, la reforma se convierta en realidad.

El desenlace de este pleno marcará no solo el futuro inmediato de millones de trabajadores, sino también el pulso político entre Gobierno, oposición y fuerzas independentistas.

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