La visión infantil necesita cuidados especiales. Algunos problemas, como el estrabismo, las cataratas o el ojo vago, pueden afectar el desarrollo visual si no se detectan a tiempo.
El trastorno del espectro autista (TEA) no desaparece con la edad. Aunque se origina en la infancia, muchas personas lo mantienen durante la adultez, aunque no hayan sido diagnosticadas.