El duelo en la infancia: Cómo actuar ante las pérdidas durante y tras el aislamiento

EmailFacebookTwitterLinkedinPinterest
15/04/2020 - 10:27
Mural en la pared que muestra a una niña que pierde un globo con forma de corazón

Lectura fácil

La pérdida de seres queridos es algo que nos acompaña desde que nacemos. Esta situación natural de la vida, puede volverse un poco borrosa cuando se trata el tema del duelo en la infancia.

Cuando llega la hora de dar este tipo de noticias a los pequeños de la casa, podemos alarmarnos, no escoger las palabras adecuadas... nos enredamos... estas situaciones, unidas a nuestro duelo propio pueden acabar dificultando la manera en la que el niño va a entender la muerte.

Ante unos momentos tan complicados, por los que todos pasamos alguna vez en nuestra vida, y que muchos no sabemos cómo transmitir, lo primero que debemos hacer es dejar a un lado los tabúes.

Duelo en la infancia: Cómo dar una mala noticia

Llegado el momento son muchas las dudas que nos surgen. Contarle a un niño, o no, la pérdida de un ser querido, cómo decírselo, qué decirle o directamente, nos inunda de miedo a poder traumatizarle.

Lo que más preocupa, según los expertos en psicología, es la forma en la que el pequeño experimentara el duelo. Muchas veces, los adultos tendemos a anticiparnos, y olvidamos que los niños asumen esta realidad universal con más naturalidad que nosotros.

Ante todo, tenemos que tener una cosa clara: la verdad. Y es que al igual que nosotros, los más pequeños también tienen preguntas y, obviamente, merecen tener sus respuestas.

Debemos de tener claro que son niños, ellos lo preguntan todo, sin saber si esas cuestiones son pertinentes o si están fuera de lugar.

Para nosotros, la pérdida de un ser querido resulta muy dolorosa, y en caso de tener niños, debemos prestar atención ya que el duelo en la infancia puede acarrearles algunas consecuencias que llevarán hasta su adultez.

Tal y como afirman desde la Fundación Mario Losantos, todos los niños forman parte del ciclo de la vida. Al igual que nosotros, ellos pasan un proceso de crecer y saber, por eso es muy importante que intentemos responder de la mejor manera posible a sus preguntas

Desde la Fundación, que lleva como objetivo el cuidado de la salud y la educación con diversos proyectos a lo largo del mundo, nos dejan esta serie de pautas que seguir a la hora de comunicar la muerte a un niño, para ayudarles con el duelo en la infancia:

  • Escoger un momento íntimo: Es muy necesario encontrar ese momento, pues de esa forma el niño podrá sentirse como parte del proceso, y así podrá hacer las preguntas que necesite, expresarnos sus dudas y miedos.
  • La comunicación de la pérdida deberá realizarla alguien cercano: Ya sean los padres, y si no fuera posible, una persona con la que el pequeño tenga un vínculo especial, para que se sienta en un ambiente familiar, atendido y querido.
  • Los adultos debemos de estar tranquilos, pero no cohibir nuestras emociones: Es muy natural que nos emocionemos, y es muy bueno que los niños las vean. De esta forma comprenden que ellos pueden expresar lo que sienten. Pero hay excepciones, y es que la persona que va a comunicar la muerte esta experimentando una emoción muy intensa o desproporcionada, es mejor que sea otra más neutra quién le explique lo que ha sucedido.
  • Dar respuesta a las preguntas: Es totalmente normal que los pequeños quieran saber detalles con respecto a la muerte. Por ello es muy importante que contestemos con mucha sinceridad y naturalidad a lo que quiera saber, "por morboso que nos parezca". Del mismo modo que podemos decirles que no sabemos responder a eso que nos preguntan cuando ni nosotros mismo conocemos la respuesta.
  • No es necesario darle toda la información de golpe, es mejor hacerlo de una manera gradual.

La FMLC recalca que estos aspectos son de vital importancia para hacerles entender a los más pequeños qué es la muerte, además de que les ayudarán a pasar el duelo en la infancia.

  • La universalidad: La muerte es algo que nos ocurre a todos.
  • La irreversibilidad: Quien se muere no vuelve a vivir.
  • La causalidad: Se produce porque hay una interrupción de las funciones vitales.
  • El porqué: El menor tiene que saber las causas de la muerte del ser querido.

Los adultos tenemos que tener también claros estos aspectos: dejar que el niños exprese los sentimientos que quiera y no tener miedo de provocar algún tipo de trauma o herirle.

Hay que dejarle libre, que exprese lo sentimientos si le sale, y sino también. Además, nosotros mismo podemos transmitirles cómo nos sentimos, y hacerles saber que cuando quieran hablar, ahí estaremos para ellos.

Por otro lado debemos de saber que el duelo en la infancia no es igual que el de un adulto. Ellos viven la muerte de una forma más natural que nosotros. Muchas veces si se impactan es porque los adultos nos impactamos igualmente y les transmitimos esos sentimientos.

El aislamiento por la pérdida de un ser querido

Nos ocurre exactamente lo mismo a los adultos. Y es que, el algunas ocasiones tendemos a aislarnos. El proceso del duelo, tal y como explican desde la FMLC, conlleva muchas demandas, a nivel externo e interno.

Al tener que afrontarlas, podemos tender hacia la introversión, de igual manera ocurre durante el duelo en la infancia. Por eso, el acompañamiento es muy importante.

Desde la FMLC nos aconsejan que les animemos a salir de casa o a salir con ellos, en caso de que sean pequeños. Ver a sus amigos, ayudar en casa, o ponernos una película les ayuda mucho a no caer en ese aislamiento.

Pero no debemos olvidar que tampoco le podemos obligar a salir de casa. Nosotros tenemos que estar ahí, para cuando necesiten hablar o transmitir cualquier sentimiento.

La muerte en tiempos de coronavirus

La situación por la que estamos pasando nos ha quitado el derecho a acompañar o despedirnos de los seres queridos que nos dejan.

En estos momentos y ante una situación fuera de lo normal, el duelo en la infancia puede llevar a los más pequeños a que su entendimiento con respecto a la muerte se vuelva aún más confuso.

Desde la FMLC y otras asociaciones y psicólogos están preparando pautas para ayudar a que los familiares ayuden a entender a los más pequeños la muerte y el porqué no podemos acompañar ni despedirnos de ese ser querido.

Ellos nos pueden realizar preguntas tales como si los familiares más longevos pueden morir, o si en caso de que uno de ellos se encuentre enfermo, preguntarse porqué no podemos visitarle.

Ante todo, debemos de contarles la verdad. Desde la FMLC nos recomiendan responder a la pregunta de sí esos familiares más mayores pueden morir siguiendo esta línea:

Sí, cielo, las personas mayores no tienen tantas defensas como los jóvenes o los niños pequeños. Ellos han vivido mucho y su cuerpo está más cansado, por eso a ellos les afecta más. Esperemos que no sea así, pero si el abuelo se pone malito quizá no le puedan ayudar.

Patricia Díaz. Fundación Mario Losantos del Campo

En caso de tener a algún familiar o a esa persona mayor en el hospital, también les surgirán dudas tales cómo si podremos verle o de qué forma hacerle llegar su cariño, a lo que la FMLC aconseja responder por este camino:

No, cariño, no podemos verlo, no dejan pasar a nadie. Ya te he explicado que esta enfermedad contagia a mucha gente y, si nosotros nos contagiamos, aunque no nos afecte sí podemos hacer que enfermen otras personas, como vecinos o amigos, por el simple hecho de tocar el ascensor, la puerta…, así que no podemos visitarlo. Quizá podemos escribirle una carta o mandarle un mensaje. Y, si se ha llevado el móvil, podemos hacerle una videollamada para que sepa que le queremos.

Patricia Díaz. Fundación Mario Losantos del Campo

En caso de tener que pasar por la situación de un fallecimiento de un familiar, debemos de seguir las pautas descritas al inicio, añadiendo las explicaciones de la situación actual.

Desde la FMLC nos recomiendan realizar alguna actividad simbólica para despedirnos de nuestro ser querido, juntos, desde casa:

  • Hacerle un dibujo y pegarlo en algún lugar de la casa.
  • Comer un plato especial que se preparase en casa de la persona fallecida en su honor.
  • Escribir un recuerdo y meterlo en una caja.
  • Elegir una foto suya que nos guste con esa persona.
  • Recordar momentos y anécdotas.

Para ayudar a pasar el duelo en la infancia, y más en esta situación, debemos recordarle al pequeño que no debe de sentir culpa por no haberse podido despedir, exista o no estado de alarma. Además de hacerle saber que esa persona, siempre supo que se la quería mucho. Y por otro lado, no debemos olvidar que las acciones se demuestran en vida.

Añadir nuevo comentario