El Gobierno de Ayuso desatiende al 75 % de las mujeres que pidieron apoyo por violencia de género

A pesar del aumento de denuncias por violencia de género en la Comunidad de Madrid, el Gobierno regional solo aprueba una parte mínima de las ayudas disponibles. Las cifras revelan un sistema de apoyo que no alcanza a la mayoría de las víctimas, lo que ha generado duras críticas desde la oposición.

Un sistema de ayudas insuficiente para las víctimas de violencia de género en Madrid

En la Comunidad de Madrid existen tres tipos principales de ayudas destinadas a mujeres víctimas de violencia de género. A pesar de su relevancia, los datos muestran que la mayoría de estas solicitudes no llegan a buen puerto, lo que ha generado críticas desde distintos sectores sociales y políticos.

Una de las líneas de apoyo está orientada a mujeres que cuentan con pocos recursos económicos y necesitan ayuda para iniciar una vida independiente, generalmente vinculada a la búsqueda de empleo. Estas ayudas consisten en un pago único que puede variar entre 4.000 y 9.000 euros. Aunque están financiadas por el Gobierno central, su gestión y pago inicial corresponde al Ejecutivo madrileño.

Durante el último año, se registraron 546 solicitudes de este tipo. Sin embargo, tan solo 151 fueron aprobadas, lo que supone una de cada cuatro. Desde la oposición se ha cuestionado la eficacia del proceso de evaluación y la falta de sensibilidad institucional ante una problemática tan grave.

Ayudas a menores huérfanos

Otro tipo de ayuda está dirigida a los hijos e hijas de mujeres asesinadas por violencia de género. En este caso, es la Comunidad de Madrid quien asume el coste total de la prestación. A pesar de tratarse de un grupo especialmente vulnerable, en 2024 solo se aprobaron siete de las once solicitudes presentadas. La cifra ha generado alarma entre organizaciones sociales y representantes políticos.

La diputada socialista Lorena Morales, que ha recogido estos datos tras formular varias preguntas a la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, considera que el proceso de tramitación presenta fallos importantes. "No es lógico que estas ayudas se pidan con el respaldo de los Servicios Sociales y luego se rechacen", asegura.

La tercera modalidad de ayuda está pensada para mujeres que han salido de un recurso de la Red de Violencia de Género, como casas de acogida o pisos tutelados. Aquí la respuesta institucional ha sido algo más favorable: de 135 solicitudes, 100 fueron aprobadas. Aun así, según Morales, el número total de peticiones sigue siendo bajo y refleja la desconfianza o el desconocimiento que tienen muchas mujeres respecto al sistema de ayudas.

Más denuncias, menos respuestas

El problema se agrava si se tiene en cuenta el aumento de denuncias en la región. En 2024 se contabilizaron más de 32.000 denuncias por violencia de género, una cifra que crece año tras año y que sitúa a Madrid como la segunda comunidad autónoma con mayor número de casos. Sin embargo, las ayudas directas concedidas están muy por debajo de las que otorgan otras regiones como Andalucía, Galicia o el País Vasco.

Desde la Consejería, se defiende que todas las ayudas denegadas han sido por incumplimiento de los requisitos legales. Pero la oposición insiste en que hay un problema estructural en la tramitación y una falta de voluntad política para mejorar el acceso a estas ayudas esenciales y acabar con la violencia de género.