El Banco de España asegura que hay 50.000 empresas menos que hace un año

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18/03/2021 - 09:11
Banco de España analiza la situación empresarial

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El Banco de España calcula que el número de compañías activas ha disminuido en casi 50.000 respecto a los niveles registrados en el mes de febrero de 2020, lo que supone una reducción interanual del número de empresas del 3,6 %.

Así lo revela el séptimo recuadro del ‘Informe Trimestral de la Economía Española’, que recoge los datos de la Estadística de Empresas Inscritas en la Seguridad Social.

Asimismo, Banco De España señala que la caída llegó a alcanzar el 8 % en el pasado mes de abril, unas semanas después de que comenzase la crisis sanitaria derivada de la pandemia del coronavirus.

El Banco de España analiza la caída de las empresas a causa de la crisis del coronavirus

Cabe recordar que una empresa inactiva es aquella que no tiene ningún empleado dado de alta en la Seguridad Social, una circunstancia que no conlleva su disolución definitiva.

Por otro lado, el documento firmado por el director de la Unidad de Análisis de Oferta y Mercado Laboral del Banco de España, Mario Izquierdo, señala que, a priori, cabe esperar que el crecimiento del número de empresas activas “tienda a presentar un comportamiento cíclico”, que acelere las expansiones y ralentice las recisiones.

Es decir, que el periodo de recuperación cause un ritmo elevado de creación de nuevas empresas y uno reducido de destrucción de compañías.

Pese al despliegue de medidas y ayudas aprobadas por el Gobierno, el informe señala que la caída del número de empresas activas es “concebible”, por dos motivos:

  • Muchas empresas arrastraban “vulnerabilidades” previas a la crisis.
  • La pandemia ha supuesto un impacto “especialmente pronunciado” para muchos sectores.

Además, las actividades más afectadas por la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus fueron:

  • La hostelería
  • Las actividades artísticas y recreativas

Según el Banco de España, ambos sectores tienen en la actualidad un 8 % menos de empresas activas en comparación con los niveles previos a la pandemia.

En este sentido, el informe señala también que las comunidades autónomas más afectadas por la pandemia han sido las más dependientes del turismo.

Baleares acumuló una caída del volumen de su tejido empresarial que alcanzó el 6,7 % en el pasado mes de febrero, mientras que Canarias registró una caída del 6,6 %.

Empresas medianas, las más afectadas

Respecto al tamaño de las empresas que en la actualidad se encuentran inactivas, el Banco de España trato estos aspectos:

  • Compañías de menos de 10 trabajadores: experimentaron la menor destrucción, con una caída porcentual del número de empresas activas superior al 3 %.
  • Compañías activas de entre 10 y 49 trabajadores: ha descendido hasta febrero en casi un 6,7 %, lo que convierte a este tipo de sociedad en la más afectada por crisis económica.
  • Compañías activas con plantillas de entre 50 y 249 trabajadores: ha descendido un 6,1 %, mientras que las que tienen más de 250 trabajadores sufrieron una caída del 3,6 % respecto a febrero del año pasado.

Estas caídas se deben, principalmente, a la bajada del número de empresas creadas a lo largo de 2020, que fue un 28,3 % inferior en comparación con los doce meses precedentes.

Sin embargo, el informe apunta que “resulta llamativo” que no se haya observado por el momento un repunte de los flujos de bajas de empresas, sino una notable reducción que alcanza el 20,7 %.

En este sentido, el informe concluye que la economía ha experimentado “una acusada reducción de la rotación de empresas”, es decir, que se han reducido tanto el número de compañías constituidas como el de disueltas.

Por último, el Banco de España señaló que “una fuente de inquietud de la política económica que cobrará relevancia creciente en el futuro, es la posibilidad de que los requerimientos a los que obligan las medidas y ayudas aprobadas por el Gobierno entorpezcan el necesario cese en su actividad de las empresas que no sean viables, lo que dificultaría el desplazamiento de recursos productivos hacia las actividades beneficiadas por las transformaciones estructurales de la economía”.

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