España considera el racismo como un problema insignificante en el país

El racismo no es visto por los españoles como un problema con importancia, por lo que lo sitúan como uno de los últimos desafíos del país, según se refleja en el barómetro de mayo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

De acuerdo con este estudio, que fue realizado a comienzos de este mes, los españoles no consideran que el problema de los insultos racistas al futbolista del Real Madrid Vinicius esté extendido dentro de la sociedad.

Este punto de vista por parte de los españoles es preocupante, porque si no vemos este tema como importante, se acaba tapando y dejando de lado, en vez de darle la solución que necesita con urgencia.

El racismo, ocupa el puesto 54 de 65 sobre temas y desafío importantes para la sociedad

Así, el CIS de mayo, como todos los meses, incluye un listado con lo que los encuestados consideran los principales problemas de España, en los que se incluye una variedad de cuestiones.

El racismo aparece en este sondeo en el puesto 54 de 65, lo que implica que es situado por los españoles como uno de los últimos desafíos. En concreto, el 0,3 % de los entrevistados sitúan la discriminación por raza como un problema para el país.

Además, el 0 % de los encuestados ve el racismo como el primer problema de España, el 0,1 % lo sitúa en una segunda posición y el 0,2 % como el tercer problema.

Esta clasificación de retos estaba encabezada en mayo por “la crisis económica, los problemas de índole económica”, seguida por el paro, “los problemas políticos en general”, la sanidad y el “el mal comportamiento de los políticos”.

¿Es España racista?, "Evidentemente. La primera vez que escuché esto de los cánticos llamando simios a jugadores negros fue hace 20 años y 20 años más tarde estamos con el mismo tema. España sí es un país racista y además es un país autocomplaciente con su racismo. Hace 20 años le hacían lo mismo a Eto’o y hace 10 años a Dani Alves", responde el sociólogo y escritor Carlos Delclós para Nius Diario.

Que esto siga sucediendo a estas alturas de la historia, me parece un hecho bastante sobrecogedor y para ponernos a temblar de miedo.

El fútbol, el mayor foco de concentración de racistas y odio

Si, puede ser el deporte por excelencia, pero a su vez, se convierte en un movimiento de masas que intimida, pues aquí parece juntarse, en ocasiones, lo peor de cada casa, lo más radical y extremo.

La cuestión de si España es un país que tiene una sociedad con racismo ha saltado a los medios de comunicación la semana pasada, después de los insultos a Vinicius este domingo en el partido con el Valencia. El debate ha dado lugar a la intervención del propio presidente de Brasil, Lula da Silva, quien ha asegurado que “no es posible que casi a mediados del siglo XXI tengamos el prejuicio racial cobrando fuerza en varios estadios de fútbol de Europa”.

Es por ello de vital importancia que todas las autoridades pertinentes, así como el Gobierno central, tomen cartas en el asunto y establezcan medidas para que el fútbol no sea una vía donde el racismo pueda extenderse.